Josep Mirabent

Josep Mirabent i Gatell, a pesar de nacer en Barcelona, su familia era originaria de Sitges y fue allá donde pasó los primeros años de su vida. Realizó sus estudios en la Escuela de La Lonja de Barcelona, donde fue discípulo de Pau Milá Fontanals, Claudi Lorenzale y Segismond Ribó, de los que recibió la influencia de la estética nazarena. Como decorador –uno de los máximos exponentes catalanes de pintura decorativa de la segunda mitad del siglo XIX–, destacaron sus trabajos ornamentales del Gran Teatro del Liceo de Barcelona, junto a Antonio Caba, Ramón Martí Alsina, Juan Vicens Cots, Agustín Rigalt, Félix Cagé y Luis Serra, los ocho medallones que realizó en el Paraninfo de la Universidad de Barcelona y la decoración de los templos madrileños del Buen Suceso, las Salesas Reales y el convento de las madres reparadoras. Se especializó en pintura de naturas muertas, flores y frutas. El 1855 fue nombrado profesor de Llotja, y fue el primer maestro decorador de Barcelona, el más prestigioso y reputado de su tiempo. Fue nombrado profesor de flores y frutas de la escuela de Bellas Artes. Fue premiado en las exposiciones de Madrid de 1860, 1862, 1866 y 1877. Participó en numerosas muestras y exposiciones, obtuvo mención de honor en las Nacionales de 1856 y 1858, así como tercera medalla en las ediciones de 1860 y 1867, y condecoración en 1871. Además, fue galardonado con medalla de oro en la Exposición Universal de Barcelona de 1888. En 1889 fue premiado en la Exposición de Londres. Entre sus trabajos decorativos destaca la decoración y los plafones que pintó para el techo de la sala del Gran Teatro del Liceo, de Barcelona: se asoció a nivel empresarial con Bartomeu Ribó, y juntos realizaron varios encargos como la restauración y decoración del Café Cuyàs y varias telas para restaurar el Liceo, incendiado en 1861. También restauraron o decoraron varios edificios religiosos, como la capilla de Santa Ágata del Palacio Real Mayor, de Barcelona. A nivel individual realizó varios encargos, como el paraninfo de la Universidad de Barcelona, el Salón de descanso del Liceo, las capillas del Colegio de Santa María de Loreto, el Hospital del Sagrado Corazón, la iglesia de Montserrat, la Casa Erasmo de Jover, la casa Estruch, la casa de Fernando Suba, los esgrafiados de la fachada de la Biblioteca Museo Víctor Balaguer o la casa de Chocolates Juncosa. A pesar de estar enfermo, llegó a participar a la primera Fiesta Modernista de Sitges. Murió el 30 de octubre de 1899.