LA VANGUARDIA
Cultura|s
La cámara de las maravillas es un invento renacentista en el que se trataba de resumir en una única estancia una reflexión sobre el teatro del mundo, de todos los elementos, científicos, culturales o geográficos, que servían como génesis nuclear del tiempo histórico desde que era mensurable, alcanzando notable importancia los mapas y las cartografías que proyectaban la realidad física de nuestro planeta.
Frederic Amat (Barcelona, 1952) casi podría ser calificado como un creador del Renacimiento, por la multiplicidad de sus labores artísticas desde la cerámica, la escenografía, la escultura, la fotografía, el cine y las intervenciones en el espacio público, lo que lleva a que esta confabulación con los elementos que conforman el imaginario estético de la galería Artur Ramon con las obras de Amat, den a luz, con palabras del escritor y filósofo Amador Vega, a una cromotopografía de los deseos.
Amat fusiona la imagen con el lenguaje literario convirtiendo la emoción en conocimiento como quedó claro con la escenografía de El Público de Lorca junto a Fabià Puigserver y en la dirección del documental Viaje a la Luna que en los años 20 había contado con guión del propio Federico, presentándose actualmente en la galería barcelonesa, en el diálogo de correspondencias, Nueve cartografías, su último trabajo, imbuido de su perpetuo lirismo.
Carlos García Osuna